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Manila.- El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, declaró el "estado de anarquía" tras el atentado terrorista perpetrado anoche en un popular mercado de la ciudad de Dávao, en la isla de Mindanao, que dejó al menos 14 muertos y más de 60 heridos.
"Vivimos tiempos extraordinarios. Estamos intentando lidiar con esta crisis ahora. Parece que hay un ambiente de anarquía", señaló el mandatario durante una comparecencia ante la prensa en el lugar del suceso pocas horas después de la explosión, reportaron los medios locales.
El jefe de Estado aclaró que esta medida no está relacionada con la ley marcial, aunque implica un incremento de la presencia de militares y de policía por todo el país para combatir la amenaza terrorista.
"No es ninguna ley marcial, pero estoy invitando a las Fuerzas Armadas de Filipinas, al Ejército y a la Policía a dirigir el país según mis especificaciones", añadió .
El presidente Rodrigo Duterte, quien fue alcalde de Davao durante más de dos décadas, se encontraba en su ciudad natal, en el momento del atentado, para presenciar la inauguración de una terminal de transporte marítimo.
La explosión ha ocurrido alrededor de las 22:00 hora local del viernes en una avenida plagada de puestos callejeros de todo tipo, dijo la inspectora de Policía, Katherine de la Rey, a ABS-CBN.
Davao se encuentra en la isla meridional de Mindanao, una convulsa zona donde operan varios grupos rebeldes, entre ellos Abu Sayyaf, que ha reivindicado el atentado en el que han muerto al menos 14 personas y 67 han resultado heridas, según el último reporte de la policía.
El portavoz del grupo yihadista, Abú Rami, afirmó que el atentado es una "llamada para la unidad de todos los 'muyahidines' del país" y en respuesta a la guerra que ha lanzado el Ejército filipino contra Abú Sayyaf.
Abu Sayyaf, que se ha declarado seguidor del Estado Islámico y ha protagonizado algunos de los atetnados terroristas más sangrientos del país, advirtió que en los próximos días van a perpetrar ataques similares.
