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En días recientes, la diputada local de Morena, Guadalupe Tlaque Cuazitl, puso sobre la mesa la posibilidad de incrementar las causas para actuar contra un delincuente en legítima defensa, incluyendo agresiones en negocio o vehículo.
Aunque muchos pueden considerar esta propuesta como acertada, debido al clima de inseguridad que se vive no solo en Puebla, sino en todo México, el incrementar el margen para actuar en legítima defensa también puede traer riesgos que generarían problemas mayores.
Sin duda, el principal problema que se podría dar es el incremento de armas de fuego ilegales en México, lo que ya de por sí es un problema para las autoridades de nuestro país.
Y es que al aprobar un mayor margen para defenderse en caso de un asalto o agresión, también provocaría en la sociedad la inquietud de comprar algún arma de fuego para poder repeler cualquier tipo de ataque.
Sabemos que los requisitos para poder portar un arma de fuego son muchos, pues va desde tener un curso que acredite los conocimientos en cuanto a tiro, hasta recibir la pistola por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Todos estos requisitos serían saltados por los mexicanos, ya que resultaría urgente armarse para poder hacer frente a cualquier acto de delincuentes o agresores y defender a su familia y bienes.
En México se calcula que hay más de dos millones de armas ilegales, provenientes principalmente de Estados Unidos. De acuerdo con datos de la Sedena, de esta cifra solo se han recuperado 332,689 armas de fuego en las campañas llevadas a cabo por la dependencia.
Otro factor a tomar en cuenta es el linchamiento. La sociedad está harta de la delincuencia y las masas pueden ser muy peligrosas, por lo que esta iniciativa también podría dar pie a que se den más actos de justicia por propia mano.
Debemos tomar en cuenta que en los últimos 5 años, los linchamientos han aumentado hasta en un 400 %. Tan solo en 2019 se dieron 174 intentos de linchamientos, de los que se consumaron 16, dejando un total de 22 muertes.
Puebla capital, San Martín Texmelucan, Tehuacán, Amozoc y Atlixco son los municipios con mayor número de linchamientos en la entidad.
De esta manera, el incrementar las causas de la legítima defensa podría traer otros daños colaterales que no se están contemplando en estos momentos.
