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Catalogado como uno de los mejores jugadores que ha pasado por el Puebla en su historia, el chileno Jorge “Mortero” Aravena tuvo una salida del club en 1991 que fue poco explicada en su momento, pero que 29 años después por fin tuvo un porqué.
En una charla que tuvo a través de una video llamada junto al también parte del Campeonísimo del Puebla, Marcelino Bernal, ‘Mortero’ relató que, tras tres años en el club, le llegó una oferta del futbol brasileño, un sueño que tenía desde el inicio de su carrera y que quiso cumplir, dejando a la Franja.
“Yo llegué al Puebla en 1988 porque don Emilio (Maurer) me compró del Deportivo Cali de Colombia. En Puebla me sentí muy cómodo y me arrepiento de no haberme quedado a vivir en Puebla, pero siempre tuve el sueño de jugar en Brasil y con 33 años me llegó una oferta y la quise aprovechar”, relató Aravena a partir del minuto 43 de la entrevista.
El habilidoso mediocampista fue contratado por los camoteros en 1988 debido a la recomendación del entonces entrenador Pedro García, por lo que Maurer hizo contacto directo con el chileno, lo convenció y dejó al Deportivo Cali donde compartía plantel con Carlos “Pibe” Valderrama.
Ya enfranjado, Aravena fue parte del Campeonísimo en 1990 que consiguió en abril la Copa ganándole la final a Tigres y en mayo la Liga derrotando a Leones Negros. En julio de 1991, previo a que la Franja jugará el torneo de la Concacaf que a la postre ganaría, el andino se fue al Portuguesa de Brasil, donde solo estuvo un año.
Posteriormente, ya como director técnico, “Mortero” tomó las riendas del Puebla en 2005 cuando estaba en la Primera A, pero cuando se perfilaba a ser campeón, tuvo un desacuerdo con Maurer y dejó el puesto.
