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Los tripulantes de la Estación Espacial Internacional volverán a permanecer encerrados durante el fin de semana en el segmento ruso para localizar la fuga de aire que sufre el laboratorio orbital, informó la corporación espacial rusa Roscosmos.
"Se ha realizado el cierre de las escotillas de la EEI. La tripulación (...) se aísla durante el fin de semana en el segmento ruso para localizar la fuga de aire", dice el comunicado.
Según la nota, durante el encierro los tripulantes podrán desplazarse en el interior de los módulos rusos Zariá, Zvezdá y Poísk, así como acceder al carguero espacial Progress y a la nave tripulada Soyuz MS.
"Durante las labores la tripulación irá trasmitiendo información actual sobre el estado de la atmósfera (en la estación) a los centros de control de vuelos de los países socios", agrega el texto.
La apertura de las escotillas está prevista a partir de las 8.00 GMT del 28 de septiembre.
Una pequeña fuga de aire fue detectada en la estación orbital en septiembre de 2019. El pasado agosto, cuando se supo que su intensidad aumentó, los tripulantes se encerraron durante cuatro días en el segmento ruso para localizar la fuga, pero no lograron hacerlo.
Una fuente dijo a Sputnik que la EEI pierde unos 220 gramos de aire al día, si bien la fuga no representa amenaza alguna para la estación ni para sus tripulantes.
Actualmente se encuentran en la EEI los rusos Anatoli Ivanishin e Iván Vagner y el norteamericano Christopher Cassidy.
