
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, levantó la polémica nuevamente con su intención de dar asilo político al programador australiano Julian Assange, quien en estos momentos está preso en Inglaterra por cargos como espionaje cibernético.
El intento del mandatario mexicano a todas luces es un error diplomático que traería consecuencias fuertes a nuestro país, pues Estados Unidos busca la extradición del fundador de WikiLeaks para que sea juzgado por sus actos de espionaje, desafiando de esta manera al próximo presidente estadounidense Joe Biden.