
La inseguridad alimentaria en Afganistán se ha agudizado desde la llegada al poder de los talibanes que varias ONG y la ONU denuncian que los padres de familia se han visto obligados a vender a sus hijos por 400 euros, ya que ellos no pueden mantenerlos y muchas veces no tienen que comer.
De acuerdo con Antena 3, la crisis humanitaria en Afganistán ha empeorado desde agosto, cuando los talibanes regresaron al poder; pero las condiciones, sobre todo para niños y mujeres, son cada vez peores.
Los trabajos y el acceso a alimentos han disminuido, lo cual ha afectado a familias de clase media, que ahora están al límite de sus posibilidades. Además, muchas familias venden a sus hijos por 400 euros para poder comer.
Según un informe del Grupo de Agricultura y Seguridad Alimentaria de Afganistán de Naciones Unidas, "más de la mitad de la población de Afganistán, el equivalente a unas 22,8 millones de personas, se enfrentará a una inseguridad alimentaria aguda a partir de noviembre".
Además, la Organización de Servicios Sociales y Bienestar Social afgana Ehsas, informó que durante los últimos meses, el número de personas que solicitan asistencia humanitaria ha incrementado hasta 70%.
Al respecto, los talibanes anunciaron que en las próximas semanas van a repartir 66,000 toneladas de trigo a través de un programa de trabajo para aquellas personas que más lo necesiten.
Sin embargo, desde que llegó al poder, el gobierno talibán no ha pagado los sueldos de unos 500,000 empleados, y según reportes de varias ONG, la suspensión de fondos internacionales hace prácticamente imposible que el país supere la crisis humanitaria en la que se encuentra.