Un grupo de talibanes acudieron a una boda no para festejar, sino a imponer su ley islámica, ya que al llegar a la celebración los hombres abrieron fuego contra los invitados por reproducir música. Al menos dos personas murieron y nueve resultaron heridas. Los hechos sucedieron en Nangarhar, Afganistán.
De acuerdo con Antena 3, los testigos cuentan que los hombres armados llegaron al evento alrededor de las 22:30 horas. Ingresaron al inmueble y apagaron el reproductor de música, luego dispararon contra los invitados de forma indiscriminada. Entonces se retiraron.
De inmediato los invitados trasladaron a los heridos hasta un hospital cercano y descubrieron que los agresores habían asesinado a dos personas e hirieron a otras seis. Camino al nosocomio, tras pasar un control de los talibanes, otro grupo diferente de combatientes abrió fuego y lesionó a tres personas más.
Al respecto, Zabihullah Mujahid, principal portavoz de los talibanes, afirmó que está investigando lo ocurrido. "Nadie entre las filas del Estado Islámico tiene el derecho a evitar la música, excepto el Ministerio para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio, y solo a través de los rezos", dijo.
Por el momento la música no ha sido prohibida en Afganistán; sin embargo, la mayoría de los talibanes considera que está proscrita por el islam, por lo cual implementan medidas para erradicarla de la nación.
Durante su primer régimen, entre 1996 y 2001, los talibanes prohibieron la música, según su estricta interpretación de la ley islámica. También impidieron que las mujeres salieran de sus casas y se les prohibió trabajar e ir al colegio.
