Frank Montgomery, presidente del Consejo de la Asociación Médica Mundial (AMM), advirtió que ómicron, la nueva variante del COVID-19, pueda ser tan peligrosa como el ébola. Además, aseguró que la única forma de evitar que surjan más mutaciones es la vacunación.
En entrevista para el medio alemán WAZ, Montgomery dijo que el mundo creyó que podría conseguir la inmunidad colectiva hasta que llegó la variante delta, que generó otra ola de coronavirus por su alto grado de infección y prevalencia. Ahora su preocupación es ómicron, pues al parecer es más fuerte.
Al respecto, dijo: “Todavía no sabemos exactamente su peligrosidad, pero parece que ómicron está propagándose rápidamente. Mi gran preocupación es que se pueda tratar de una variante tan infecciosa como delta y tan peligrosa como el ébola”.
Asimismo, el presidente de la AMM teme que el impacto de la nueva variante ómicron pueda generar una nueva ola de COVID-19 como la primera y ponga a prueba los sistemas hospitalarios de los países.
Además, explicó que el aumento de los contagios promueve el desarrollo de nuevas cepas, más patógenas y dañinas, por ello hay que hacer todo lo posible para disminuir la tasa de incidencia. "No debemos dar al virus la oportunidad de mutar".
En este sentido, Montgomery opina que solo la vacunación podría ayudar a combatir la situación y respaldó la inmunización obligatoria contra el COVID-19. “Con la vacunación general obligatoria todas las medidas de restricción podrían levantarse" y la gente volvería a su vida normal, afirmó.
Por último, el experto dijo que las vacunas incrementan la protección inmunológica; sin embargo, no se sabe exactamente cuánto durará. “Quizás necesitemos volver a vacunarnos todos los años", concluyó el médico.
