
La farmacéutica Moderna prepara una vacuna de refuerzo contra el COVID-19 enfocada en la variante ómicron, y según dijo el presidente de la compañía, el antígeno podría estar listo en marzo de 2022 y solo esperaría la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA).
En entrevista para Reuters, Stephen Hoge, presidente de Moderna, dijo que las vacunas de refuerzo que llevan genes dirigidos de manera puntual a las mutaciones de la variante ómicron serían la forma más rápida de enfrentar la probable reducción de la eficacia de las vacunas.
Además, reveló que la empresa ya trabaja en una vacuna “multivalente” que combatiría hasta cuatro variantes del coronavirus, incluida la nueva cepa recién descubierta. Aunque dijo que “eso podría llevar varios meses más”.
Asimismo, Hoge dijo que el proceso podría durar tres o cuatro meses debido a que la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos ha exigido pruebas clínicas en la fase intermedia de los procesos de aprobación de las vacunas.
“Los refuerzos específicos de ómicron, siendo realistas, no se producirán antes de marzo y tal vez más en el segundo trimestre”, dijo Hoge, a menos que la FDA cambie sus reglas respecto los datos necesarios para la autorización.
De acuerdo con información de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, hasta el momento el país solo ha registrado un caso de COVID-19 de la variante ómicron, el cual fue identificado en California.
La Organización Mundial de la Salud sigue estudiando ómicron, denominada “variante de preocupación”, para comprobar si es más contagiosa o causa una enfermedad más grave que otras variantes y si las vacunas actuales son ineficaces.