
El 27 de diciembre un asteroide pasará muy cerca de la Tierra y la probabilidad de que colisione contra nuestro planeta es muy baja; sin embargo, la NASA ha clasificado el cuerpo celeste como peligroso.
De acuerdo con un comunicado de la NASA, el asteroide se acercará unos 4,5 millones de kilómetros, más de 12 veces la distancia que existe entre nuestro planeta y la Luna, y está clasificado como Apolo, es decir, es uno de los más peligrosos en caso de colisionar contra la Tierra.
Hasta el momento se sabe que el cuerpo espacial tiene dimensiones similares al monumento a Washington: una altura de 169 metros, por lo que su descubrimiento ha permitido conocer cómo será su trayectoria con bastante anticipación.
Su órbita no representa ninguna amenaza para el planeta; sin embargo, se estima que de colisionar contra la Tierra podría generar aproximadamente 6 millones de muertes humanas, daños ambientales, tsunamis y terremotos. Expertos estiman que el impacto sería similar al de una bomba nuclear.
Tan solo el meteorito de 17 metros que explotó en la atmósfera, cerca de Chelyabinsk, Rusia, en 2013, causó daños materiales en unos 7,000 edificios alrededor de su impacto, por lo cual el que pasará cerca de la Tierra a finales de año podría ser catastrófico.
Los expertos de NASA refieren que el inconveniente de los asteroides considerados pequeños es que son difíciles de localizar con antelación. De momento, la Universidad John Hopkins lleva a cabo una investigación de forma virtual; no obstante, si los cálculos fallan podría ser catastrófico.
Por último, científicos estiman que en 2028 un asteroide, clasificado como Apolo, pasará a solo 240,000 kilómetros de la Tierra. Por lo cual misiones como DART, de la NASA, serían necesarias para asegurar la supervivencia en el planeta.