
El Municipio de Quito decretó el martes tres días de luto en el Distrito Metropolitano de la capital de Ecuador, como solidaridad a las víctimas que dejó el deslave que en la tarde y noche del lunes afectó a dos barrios del nororiente de la ciudad.
"Ante lo ocurrido la tarde de ayer, lunes 31 de enero, en el sector La Gasca, el alcalde Santiago Guarderas declara tres días de luto en el Distrito Metropolitano de Quito. Nos solidarizamos con las familias afectadas por el aluvión en la capital", dijo el Municipio en su cuenta de la red social Twitter.
Hasta el momento los fallecidos suman 24 personas, los heridos 47 y 15 personas están desaparecidas.
El alcalde Guarderas dispuso el martes 40 cierres viales mientras se realizan las labores de rescate y limpieza.
En una conferencia de prensa, Guarderas dijo que se asignaron 2,500 efectivos de diferentes unidades municipales y dependencias del Gobierno a varios frentes de trabajo, tanto para trabajar en recuperar la movilidad, como en las tareas de rescate.
En dicha logística se emplean 392 equipos entre excavadoras, retroexcavadoras, volquetas, drones y motos.
AYUDA PARA DAMINIFACADOS
El vicepresidente de la República, Alfredo Borrero, tras emitir un mensaje de solidaridad enviado por el presidente Guillermo Lasso, desde China, en donde realiza una visita oficial, informó que el Gobierno entregará un bono solidario a los damnificados, aunque no anticipó el monto de dicho bono.
Adicionalmente, para ayudar a los damnificados, el Municipio activó puestos de recepción, así como brigadas médicas y de atención psicológica.
Como parte del trabajo de las brigadas médicas, se realizan pruebas de detección de covid-19.
Los centros de acopio de donaciones se ubican en dependencias municipales en el centro, norte, sur y los valles de la ciudad, en donde se reciben alimentos no perecibles, agua, ropa, bebidas hidratantes y artículos sanitarios.
Mientras tanto, el Grupo de Funerarias La Paz, en una alianza público privada con el Municipio, ofreció servicios funerarios gratuitos para personas de escasos recursos y que no contaban con seguridad social, que fallecieron en el aluvión.