
La Organización Mundial de la Salud (OMS) documentó 72 ataques contra instalaciones sanitarias en Ucrania desde el comienzo de la operación militar rusa, informó el secretario general de la ONU, António Guterres.
"Desde el comienzo de la guerra en Ucrania, la OMS ha verificado 72 ataques al sistema de la salud que provocaron 71 muertos", indicó Guterres en su cuenta de Twitter.
El titular de las Naciones Unidas instó a garantizar la protección del derecho a la salud.
"Los trabajadores sanitarios y las personas que buscan atención médica no son blancos", subrayó.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, anunció el 24 de febrero el lanzamiento de una "operación militar especial" en Ucrania alegando que las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, necesitan ayuda frente al "genocidio" por parte de Kiev.
Uno de los objetivos fundamentales de esa operación, según Putin, es "la desmilitarización y la desnazificación" de Ucrania.
Según el Ministerio de Defensa ruso, los ataques militares no están dirigidos contra instalaciones civiles, sino que buscan inutilizar la infraestructura bélica.
El Centro Nacional de Gestión de Defensa de Rusia ha acusado a los grupos paramilitares ucranianos de utilizar la infraestructura civil, incluyendo hospitales y edificios residenciales, para atacar posiciones de los militares rusas.
Entre el 24 de febrero y el 26 de marzo, las hostilidades en Ucrania causaron la muerte de al menos 1.119 civiles y dejaron heridos a otros 1.790, pero el balance real es mucho más alto, según la ONU. La mayoría de estas víctimas civiles, entre las que hay 99 niños muertos y 126 heridos, son resultados de ataques aéreos y de artillería.
Más de 3,82 millones de ucranianos buscaron refugio en los países vecinos, a lo que se suman unos 6,5 millones de desplazados dentro de Ucrania.