
El 15 de abril la Organización Mundial de la Salud anunció la aparición de un brote de hepatitis aguda de origen desconocido en Europa y Estados Unidos que está afectando a niños pequeños previamente sanos. Desde entonces, el número de casos ha aumentado rápidamente, pues se han detectado al menos 169, de los cuales 1 murió y otros 17 necesitaron trasplante de hígado.
Los expertos afirman que los casos pueden estar relacionados con un virus comúnmente asociado a los resfriados, el adenovirus, pero se está investigando más a fondo. “Aunque el adenovirus es una posible hipótesis, se está investigando el agente causante”, dijo la OMS, señalando que el patógeno se ha detectado en al menos 74 de los casos.