
La crisis en Siria que continúa desde hace 11 años, dejó al menos 213 niños muertos o heridos solo entre enero y marzo de 2022, alertó este domingo el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
"La crisis en Siria está lejos de terminar. Solo en los primeros tres meses de este año, 213 niños murieron o resultaron heridos", dice el comunicado emitido de cara a la Conferencia de Bruselas sobre el apoyo y la asistencia al país árabe que se celebrará los próximos días 9 y 10 de mayo.
En total desde el comienzo en 2011, el conflicto sirio ha costado la vida de más de 13.000 menores, destaca la nota.
Los niños sirios siguen "viviendo con miedo, necesidad e incertidumbre" tanto dentro de su país como en los Estados vecinos, agrega, y más de 6,5 millones de ellos necesitan asistencia, lo que supone la mayor cifra registrada en lo que dura la crisis siria.
A este respecto, Unicef reitera su llamamiento a las "partes del conflicto y a quienes tienen influencia sobre ellas para alcanzar una solución política a la crisis por el bien de los niños de Siria y su futuro".
"Todos los días cuentan. Los niños de Siria han sufrido durante demasiado tiempo y no deberían sufrir más, concluye la entidad.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto en el que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas.
La solución del conflicto se busca en dos plataformas, la de Ginebra, bajo los auspicios de la ONU, y la de Astaná (nombre antiguo de la capital de Kazajistán, actual Nursultán), bajo la mediación de Rusia, Turquía e Irán.
Actualmente los esfuerzos se centran en la búsqueda de una solución política a la crisis siria y el retorno de los refugiados.