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Ocho meses después de que una casona en la calle 20 Oriente, entre la 4 y 6 Norte, sufriera el derrumbe de su fachada y el desplome de uno de sus techos, ahora otro inmueble en esa misma calle padeció el desprendimiento de su cornisa.
Fue la tarde noche del miércoles cuando vecinos de esa calle reportaron que la cornisa de la casa marcada con el número 427 estaba a punto de colapsar, por lo que pedían la intervención de las autoridades.
Elementos de Protección Civil del municipio de Puebla se movilizaron al lugar para hacer recomendaciones a los habitantes de la casa y acordonar la zona, recordando que no podían retirar ninguna estructura al estar en un área bajo vigilancia del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Aunque ninguna parte de la cornisa que se desprendió cayó al suelo, se hizo un acordonamiento con cinta plástica que no dejó contentos a los vecinos, quienes reprocharon que las autoridades locales no hagan más.
A través de redes sociales recordaron que en septiembre del año pasado la casa marcada con el número 412 de esa misma calle, a escasos 30 metros de distancia, sufrió el desplome de un techo y la fachada de la casa.
Aunque no hubo heridos, en aquella ocasión la familia que ahí vivía tuvo que abandonar el inmueble, que ocho meses después continúa sin ser reparado.
