
La policía de Brasil halló restos humanos durante la búsqueda del periodista inglés Dom Phillips y el indigenista Bruno Pereira, quienes desaparecieron a principios de junio en la Amazonia, informó el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Anderson Torres.
"Acabo de ser informado por la Policía Federal que 'restos humanos fueron hallados en el sitio donde se estaban realizando las excavaciones'. Serán analizados", dijo el funcionario en Twitter.
Según medios locales, dos hermanos -Amarildo da Costa Oliveira y Oseney da Costa de Oliveira- confesaron su participación en la muerte de Phillips y Pereira, quienes fueron asesinados a tiros, luego quemados y enterrados.
La policía no tiene aún un motivo del supuesto crimen, pero investiga si está relacionado con la pesca ilegal en la región.
Phillips y Pereira desaparecieron el 5 de junio en la región del Valle del Javari, en el norte de Brasil, cerca de la frontera con Perú, cuando iban a visitar a un equipo de vigilancia indígena para que el periodista pudiera hacer unas entrevistas.
Las tareas de búsqueda siguen desde entonces y hasta ahora se encontraron objetos personales de los dos desaparecidos.
El 15 de junio, el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, aseguró que Phillips era "mal visto" en la zona debido a sus reportajes, y que por eso debería haber sido más cuidadoso.
"Ese inglés era mal visto en aquella región porque hacía muchos reportajes contra "garimpeiro", temas ambientales; en aquella región, bastante aislada, había mucha gente a la que no le gustaba; tendría que haber redoblado la atención consigo mismo, y decidió hacer una excursión", criticó en una entrevista en un canal de YouTube, según recoge el portal G1.
Bolsonaro añadió que en la zona donde los dos desaparecieron hay "piratas de río, todo lo que se pueda imaginar" y que es "muy temerario" andar por allí sin estar debidamente preparado físicamente y armado con autorización de la Fundación Nacional del Indio (Funai).
Días atrás, el presidente ya responsabilizó indirectamente a los desaparecidos de su situación, al decir que estaban en la Amazonía en una "aventura", desmereciendo el trabajo del periodista británico, colaborador de "The Guardian".