
Un total de 32 personas murieron en un incendio provocado en una aldea del distrito de Ankazobe, a unos 100 kilómetros al oeste de la capital de Madagascar, Antananarivo, confirmó el ministro de Defensa Nacional del país, Richard Rakotonirina, a la prensa el sábado.
"Se movilizaron aviones y helicópteros para apoyar a los elementos terrestres en la búsqueda de los perpetradores de esta atrocidad que costó la vida a 32 personas", dijo el ministro.
Una fuente cercana a la investigación dijo a Xinhua que cuatro personas también resultaron heridas en el ataque y agregó que están siendo atendidas en el hospital de Ankazobe, mientras que una de ellas tuvo que ser trasladada a Antananarivo.
La fuente, quien pidió el anonimato, dijo que las víctimas pertenecen a siete familias y que incluyen a mujeres, niños y bebés. Se refugiaron en una casa e intentaron contraatacar arrojando piedras.
Los asaltantes, armados con tres fusiles de asalto AK-47, un rifle MAS-36 y ocho escopetas, quemaron la casa desde la planta baja. Encerraron a las víctimas y dispararon contra quienes intentaron escapar, dijo la misma fuente.
El presidente malgache, Andry Rajoelina, ofreció el domingo sus condolencias a las familias de las víctimas y condenó el acto. También anunció que los autores del crimen están siendo perseguidos y serán sancionados de acuerdo con la ley vigente.