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La economía de México enfrentará un panorama "altamente incierto y complicado" en 2023, en medio de retos geopolíticos y una elevada inflación a nivel global, consideró hoy martes el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
En la revisión de sus indicadores mensuales, el IMEF redujo el pronóstico de crecimiento del producto interno bruto (PIB) mexicano para 2023, que modificó al 1,4 por ciento desde el 1,8 por ciento.
La estimación para este año aumentó a un 1,9 por ciento, desde el 1,8 por ciento que calculaban los socios del IMEF en julio anterior.
"La confluencia de numerosos factores de gran impacto conforman un panorama económico difícil de entender y más aún de pronosticar", explicó el presidente nacional del IMEF, Alejandro Hernández.
"En México, la economía luce básicamente estancada en los indicadores más recientes", agregó el dirigente en una conferencia de prensa virtual.
De acuerdo con el análisis, la economía global, sobre todo de países de elevada influencia, enfrenta un entorno adverso, donde "intereses geopolíticos anacrónicos" minan la cooperación internacional.
El organismo privado del sector advirtió que de forma paralela, la inflación ha resurgido como la principal amenaza para el funcionamiento de la economía y los mercados financieros.
Según el IMEF, varios bancos centrales iniciaron tarde su lucha contra la inflación, debido a una lectura "incorrecta y complaciente", lo que derivó en una corrección apresurada de su política monetaria, que todavía luce insuficiente.
El PIB mexicano repuntó un 4,8 por ciento en 2021, desde el colapso del 8,2 por ciento en el año 2020, su peor desempeño desde la década de 1930, por los efectos derivados de la pandemia del nuevo coronavirus.
