
El Gobierno de Japón planea reabrir siete reactores nucleares que habían sido desactivados tras el desastre de Fukushima en 2011, aseguró el periódico Yomiuri.
Según el diario, las autoridades pretenden completar la operación en 2023, lo que elevaría a diecisiete la cantidad de unidades reabiertas, cinco de ellas actualmente activas y otras cinco en proceso de revisión.
En concreto, está previsto la reactivación de los reactores en las centrales de Kashiwazaki-Kariwa, Onagawa, Takahama, Shimane y Tokai.
Además, el Ministerio de Economía, Comercio e Industria evaluará aumentar la vida útil máxima de las plantas nucleares.
A su vez, el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, corroboró que su Gobierno planea reabrir los reactores nucleares que habían sido desactivados tras el desastre de Fukushima en 2011.
"Haremos lo posible para reabrir los reactores en adición a los 10 que reanudaron ya sus operaciones", señaló el jefe del Gobierno nipón en una reunión ministerial, según recoge la agencia Kyodo.
Kishida llamó también a los funcionarios a estudiar hasta fin de año la posible construcción de nuevos reactores con sistemas fiables de seguridad.
De acuerdo con las leyes, el plazo máximo de funcionamiento de una central está limitado a 40 años y puede ser extendido por otros veinte si cumple todas las exigencias y las revisiones.
Antes de la catástrofe de Fukushima, Japón obtenía el 30% de la electricidad de sus plantas atómicas.
Varios expertos no descartan cortes eléctricos en el invierno en distintas regiones del país debido a los altos precios del gas natural licuado. La temporada de calefacción puede convertirse en un gran desafío para Japón desde 2012, cuando se desactivaron todas las centrales nucleares tras el desastre de Fukushima.