Los conflictos familiares entre los príncipes William y Harry han ocupado gran parte de la cobertura mediática que ha seguido a la muerte de Isabel II, aunque ver a ambos junto a sus esposas, Catherine y Meghan, saludar a la gente en Windsor fue algo que muy pocos esperaban.
Los hermanos no habían sido vistos juntos en público desde hace más de dos años, pero todo cambió el pasado jueves. La pérdida de un ser querido en una familia puede ser un momento complicado, pues las emociones podrían revivir viejos conflictos, aunque el duelo también es una fuente de unidad.
Si se mira desde el exterior, podría parecer que las tensiones entre ambos están un poco más calmadas, aunque no se puede decir con certeza, pues nadie sabe que hay detrás de las imágenes de televisión.
De acuerdo con fuentes reales, el príncipe William fue quien extendió la invitación al príncipe Harry y Meghan para llevar a cabo este paseo. A pesar de que este fue un momento de unión, es imposible ocultar que los hermanos están recorriendo caminos completamente diferentes.
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— Free My Zimbabwe MyNation (@TapiwaTaruving4) September 11, 2022
Con la muerte de la reina, William se ha convertido en un heredero al trono, por lo que sus responsabilidades han aumentado y posee un estatus mucho mayor al de su hermano, pues ahora es príncipe de Gales, nombre que usó su padre hasta hace pocos días.
Es probable que el rey y Camilla, ahora la reina Consorte, con William y Catherine sean el grupo central, casi una unidad separada, en el corazón de la monarquía. Por otro lado, Harry está en una dirección opuesta, viviendo con Meghan y su joven familia en California, con empresas de medios, organizaciones benéficas y campañas.
Esta pareja ha tenido que crear su vida post-real, mientras siguen formando parte de la Familia Real. La muerte de Isabel II ha sido el ejemplo perfecto de que incluso entre la realeza, hay personas que tienen conflictos y reconciliaciones.
