La policía iraní detuvo a 880 manifestantes en la provincia de Guilán que protestaban por la muerte de Mahsa Amini de 22 años, informó este lunes Hossein Hassanpour, subcomandante de la policía de la provincia.
"Alrededor de 880 personas involucradas en disturbios, incitación, ataques a ciudadanos, destrucción de propiedad pública y daños a sindicatos en Gilan fueron identificadas y detenidas", dijo Hassanpour, citado por la agencia de noticias iraní Tasnim.
El funcionario señaló que la policía también arrestó a un grupo de personas que producían armas incendiarias para que los alborotadores las usaran contra la propiedad pública.
La joven iraní Mahsa Amini, de 22 años, fue detenida el pasado 13 de septiembre, en Teherán, por la policía de la moral por tener mal colocado el velo, y enviada a uno de los centros pertenecientes a la policía y al servicio militar de inteligencia, para darle una charla explicativa.
Según las autoridades, la muchacha sufrió allí un ataque al corazón y fue trasladada con urgencia a un hospital, donde falleció el 16 de septiembre.
Muchas personas acusaron de la muerte de Mahsa a la policía de la moral. En diversas ciudades del país se organizaron protestas, y en redes sociales se publican vídeos, en los que se observaba como las jóvenes se cortaban el pelo y quemaban sus velos o pañuelos.
El presidente iraní, Ebrahim Raisi, encargó al ministro del Interior investigar minuciosamente las causas y los detalles de la muerte de Mahsa, y expresó sus condolencias a los familiares de la joven.
