Seis personas, entre ellas un bebé y un niño de seis años, murieron a causa de las inundaciones y deslaves provocados por las lluvias que golpearon al estado de Paraná, sur de Brasil, en la última semana, informó hoy martes la oficina de Defensa Civil.
Las lluvias torrenciales provocaron la subida de la cuenca del Río Paraná, por lo que el fin de semana se suspendió temporalmente de las visitas al parque nacional de las Cataratas del Iguazú, atracción turística que Brasil comparte en la frontera con Argentina.
De acuerdo con la prensa local, los hermanos Nicolas Rodrigues, de ocho meses, y Nicole Luiza Rodrigues, de seis años, fallecieron luego de que el automóvil de sus padres en el que se encontraban fue arrastrado por una inundación en Pato Blanco, también en Paraná.
Los padres fueron rescatados con vida. Según informó a Xinhua un portavoz de Defensa Civil, los otros fallecidos son cuatro indígenas que fallecieron ahogados por la subida de los ríos en una zona rural de Nova Laranjeiras.
El informe de Defensa Civil indica que 38 ciudades de este estado brasileño fueron afectadas, con 2,257 personas evacuadas.
