El Gobierno de EEUU ordenó al personal en refugios para inmigrantes que garantice que las niñas y adolescentes migrantes embarazadas bajo custodia federal tengan acceso a servicios para interrumpir la gestación si así lo requieren, luego de una revisión de la Suprema Corte sobre la práctica, informó la cadena de noticias local CBS.
"Esta guía confirma que el personal (de la Oficina de Reubicación de Refugiados, ORR) no debe impedir que las niñas no acompañadas accedan a los servicios relacionados con el aborto legal y que el personal y los proveedores de atención de la ORR deben hacer todos los esfuerzos razonables para facilitar el acceso a estos servicios si se solicitan", explican las directivas según el reporte.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) y la Oficina de Reasentamiento de Refugiados, responsables de albergar a los niños no acompañados que carecen de estatus legal, han instruido a los funcionarios evitar colocar a niñas migrantes embarazadas o que han sufrido agresión sexual en instalaciones ubicadas en estados bajo control republicano que restringen el acceso al aborto.
La guía más reciente amplía las reglas emitidas en octubre pasado establecidas en respuesta a una ley de Texas (sur) que prohíbe el aborto después de las seis semanas de embarazo.
Las niñas embarazadas bajo la custodia del HHS pueden optar voluntariamente por permanecer en un estado que prohíba el aborto, pero deben ser informadas sobre sus derechos y las restricciones que enfrentan.
