Dos activistas ambientales del grupo Futuro Vegetal mancharon con un líquido que simulaba petróleo la vitrina de una réplica de una momia egipcia y rociaron sangre falsa en la pared de una sala del Museo Egipcio de Barcelona, comunicó la organización no gubernamental (ONG).
"Bañamos con 'sangre y petróleo' vitrinas del museo Egipcio de Barcelona para alertar sobre la emergencia climática", escribió la ONG en su cuenta de Twitter.
La publicación afirma que los gobiernos están engañando a la gente "sin efectuar medidas reales".
En una fotografía publicada por la organización se observa a un hombre y a una mujer sosteniendo junto a la vitrina manchada una pancarta en la que se lee "+2,5 grados, justicia climática".
Según la agencia Europa Press, el hecho no provocó daños en ninguna de las piezas del museo, y aseguró que los activistas no fueron detenidos por la policía.
En las últimas semanas, las protestas de los activistas medioambientales sobre el problema del cambio climático se han vuelto más frecuentes en Europa.
El pasado 14 de octubre, dos ecologistas del grupo Just Stop Oil, que se opone a la explotación de yacimientos de petróleo y gas, arrojaron latas de sopa de tomate sobre el cuadro 'los girasoles' del pintor neerlandés Vincent Van Gogh en la Galería Nacional de Londres.
Miembros de la misma organización lanzaron un pastel de chocolate a la cara de la figura de cera del rey Carlos III en el museo Madame Tussauds de Londres.
El 23 de octubre, dos activistas del movimiento la Última Generación rociaron puré de papas en la pintura 'los almiares' de Claude Monet en el museo Barberini en la ciudad alemana de Potsdam.
También varios activistas ambientales pusieron pegamento el pasado 27 de octubre sobre 'la joven de la perla' de Johannes Vermeer en la Galería Real de Pinturas Mauritshuis en los Países Bajos.
El 4 de noviembre, cuatro activistas de la Última Generación, tiraron sopa de verduras sobre 'el sembrador', otra obra de Van Gogh, actualmente expuesta en la capital de Italia, Roma.
