Un menor de 14 años fue detenido en el Instituto Elena García Armada, ubicado en el barrio San José Obrero, España, después de perpetrar un ataque con arma blanca contra tres profesores y dos alumnos. Como resultado de esta violenta agresión una profesora quedó herida en el ojo y otras cuatro personas con heridas de diferente gravedad.
Este incidente suscitó ciertas inquietudes entre la sociedad sobre la seguridad en las escuelas, especialmente por la facilidad con la que el menor accedió a la institución con un arma blanca. A diferencia de Estados Unidos, que cuenta con estrictas regulaciones y la Ley de Escuelas Libres de Armas (GFSA) para abordar este problema, otros países parecen carecer de medidas de seguridad similares en sus escuelas y colegios.
La GFSA de Estados Unidos obliga a los centros de enseñanza primaria y secundaria a expulsar a los alumnos que porten armas de fuego, con el objetivo de disuadir a los estudiantes de llevar armas a la escuela. En contraste con estas estrictas regulaciones, otros países no cuentan con ninguna de estas medidas.
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Los datos en Estados Unidos; sin embargo, plantean preguntas sobre la efectividad de estas medidas, ya que los tiroteos escolares han aumentado en los últimos años. En 2022 se registraron 46 tiroteos en centros escolares, la cifra más alta desde al menos 1999. En lo que va de 2023, se han producido 28 incidentes de este tipo hasta agosto.
Las mochilas escolares también se han convertido en un objeto de vigilancia en muchas escuelas, alrededor del 4 % de las escuelas públicas prohibieron las mochilas o requirieron que fueran transparentes en el ciclo escolar 2019 – 2020, según el Centro Nacional de Estadísticas Educativas.
También surgió la idea de armar a los profesores, la cual fue apoyada en una parte por el Partido Republicano en Estados Unidos, y fue tema de discusión en el país. En 33 estados de Estados Unidos se permite a los profesores llevar armas, aunque esto generó debates sobre si esto aumenta o disminuye la seguridad en las escuelas.
