El Hospital Universitario de Uppsala, en Estocolmo, informó que, debido a la falta de personal y el estrés que esto generó, se extrajo de forma innecesaria el útero de 44 mujeres que fueron erróneamente diagnosticadas, por lo que se comenzó una investigación interna.
Según informaron los medios locales, el Departamento de Ginecología del hospital se quedó sin el personal necesario por un periodo prolongado, lo que causó la acumulación en la carga de trabajo, estrés en el personal y, a su vez, malos criterios de calidad preceptivos.
De acuerdo con la información presentada, los casos sucedieron entre 2022 y 2024, y a las mujeres se les habían detectado cambios celulares que, según los médicos, coincidían con las primeras fases del cáncer de útero. Sin embargo, más tarde se reveló que los diagnósticos eran erróneos.
“Queremos disculparnos con todas las mujeres que se han visto afectadas por esto. No debería haber ocurrido”, asegura el comunicado de prensa de Johan Lugnegård, médico en jefe del hospital.
