
El doctor Hamlet Rivera advirtió sobre los peligros adicionales que representa el uso de marihuana a través de dispositivos de vapeo, especialmente en jóvenes y adultos que desconocen sus implicaciones médicas. Durante su intervención en el programa "Salud es Vida", explicó cómo esta combinación potencia los efectos negativos en los pulmones y puede generar complicaciones durante procedimientos quirúrgicos.
Una oyente relató al médico la preocupación sobre personas en su comunidad quienes utilizan vapeadores con líquidos derivados de cannabis. Rivera aclaró que, aunque en algunas regiones la marihuana cuenta con usos medicinales regulados, su consumo mediante estos dispositivos implica riesgos elevados debido a las sustancias químicas añadidas. Esta práctica, según señaló, aumenta la inflamación pulmonar y favorece la aparición de neumonitis química.
Inhalar vapores que contienen cannabis introduce al organismo partículas y compuestos los cuales irritan el tejido pulmonar. El especialista indicó cómo esta exposición directa provoca acumulación de secreciones pulmonares y compromete la función respiratoria. Estas alteraciones pueden interferir con procedimientos quirúrgicos, ya que los pulmones congestionados dificultan la administración de anestesia general y elevan la probabilidad de broncoaspiración durante la intervención.
También, subrayó que la percepción errónea de inocuidad en el consumo de marihuana mediante vapeadores contribuye a su uso extendido entre adolescentes y jóvenes adultos. La presencia de aromas y sabores atractivos facilita la aceptación de estos dispositivos, pese a sus riesgos. Además, los vapores de cannabis pueden contener mezclas no reguladas las cuales incrementan el daño pulmonar y amplían las posibilidades de complicaciones médicas.
Rivera recordó que el primer caso reportado de neumonía química asociada al vapeo fue documentado en 2015. Este paciente requirió tratamiento prolongado en cuidados intensivos debido a la severidad de su condición. Desde entonces, especialistas en salud han observado un incremento en casos similares vinculados al uso de sustancias no controladas en dispositivos electrónicos de vaporización.
Así, el uso de marihuana en vapeadores no solo afecta la salud respiratoria. Según explicó el especialista, también impacta la coagulación sanguínea y los procesos de cicatrización, factores clave en la recuperación postoperatoria. Estas alteraciones aumentan el riesgo de sangrados, infecciones y retrasos en la sanación de heridas tras una cirugía.
De este modo, Rivera recomendó abstenerse del consumo de vapeadores con marihuana o cualquier otra sustancia química al menos cuatro a seis semanas antes de someterse a una cirugía. Este periodo permite una recuperación parcial de la función pulmonar y reduce los riesgos asociados a la anestesia y a la cicatrización. Asimismo, enfatizó la importancia de informar al médico tratante sobre el uso de estos productos durante la evaluación prequirúrgica para evitar complicaciones imprevistas.
Finalmente, el médico reiteró la necesidad de crear conciencia sobre los efectos adversos del vapeo con marihuana, subrayando que la mezcla de sustancias químicas y compuestos inhalados agrava los riesgos pulmonares y quirúrgicos. Rivera instó a padres y cuidadores a mantenerse atentos al uso de estos dispositivos electrónicos de vapeo, especialmente entre menores y adolescentes, para prevenir problemas de salud de difícil manejo. (NotiPress)