
Lo que comenzó como una tendencia en TikTok terminó bajo el escrutinio de gobiernos y especialistas en salud. El hashtag #SkinnyTok, asociado a contenidos que exaltan la delgadez extrema y promueven prácticas alimentarias peligrosas, fue bloqueado a nivel global por la plataforma. La medida fue adoptada luego de advertencias oficiales de países europeos sobre los riesgos que este tipo de publicaciones representa para usuarios jóvenes.
En abril de 2025, Clara Chappaz, ministra francesa de Medios Digitales, emitió una alerta pública que derivó en una investigación formal por parte de la Comisión Europea. Según informó The New York Times, esta indagatoria se integró a un expediente previo sobre posibles violaciones a las normativas comunitarias que regulan la exposición de menores a contenido digital.
Antes de su restricción, la etiqueta había acumulado más de medio millón de publicaciones en plataformas como TikTok, Instagram y YouTube, según datos de la Alianza Nacional para los Trastornos Alimentarios de Estados Unidos (NEDA). "Glorifica la delgadez, desprecia el aumento de peso y promueve conductas alimentarias peligrosas", advirtió la organización en un comunicado.
La red social confirmó el bloqueo mediante un anuncio en el que detalla el uso de inteligencia artificial y supervisión humana para identificar publicaciones que inciten a trastornos alimenticios. Desde el martes, cualquier intento de búsqueda de #SkinnyTok redirige a una página con recursos de ayuda proporcionados por la NEDA.
Esta acción se suma a una serie de restricciones implementadas recientemente por TikTok. En marzo prohibió los filtros que simulaban sobrepeso y en noviembre limitó el uso de herramientas de alteración facial entre adolescentes. No obstante, investigaciones como la realizada por National Public Radio advierten que los sistemas de moderación de la plataforma aún presentan deficiencias frente a los riesgos para la salud mental juvenil.
TikTok asegura mantener "medidas de seguridad sólidas" orientadas a proteger a su comunidad, en especial a los usuarios menores de 16 años. Aun así, el caso de #SkinnyTok reaviva el debate sobre la responsabilidad de las redes sociales en la reproducción de estándares físicos irreales y sus consecuencias en la percepción corporal. (NotiPress)