En Hollywood están estancados en busca de una nueva gran franquicia; por ello, el rugido de los motores de “Fast & Furious” sonarán por última vez (¿Ahora sí?). Desde luego, Vin Diesel estará a la cabeza de la “pandilla” del volante, que estrenará su décimo primer capítulo en abril de 2027.
Fast & Furious, una de las franquicias más exitosas de la historia, promete en su versión onceava muchos recuerdos que enchinarán el cuero a los fanáticos.
Y es que, en la FuelCon de Pomona, California, el calvo “Toretto” ha revelado una historia capaz de poner nostálgico a cual más, o de provocar críticas y malestar, según cómo se mire.
“El estudio (Universal) me dijo: 'Vin, ¿podemos estrenar el final de Fast & Furious en abril de 2027, por favor?”, contó Diesel en la FuelCon. “Con tres condiciones” fue su categórica respuesta.
Esas condiciones, sentenció Diesel, son las siguientes: "Primero, ¡devolver la franquicia a Los Ángeles! La segunda, devolverla a la cultura de los coches, a las carreras clandestinas. La tercera fue reunir a Dom [Toretto] y Brian O'Conner".
Los fanáticos de Fast & Furious saben de sobra que la muerte de Paul Walker, el actor del policía O'Conner, es el acontecimiento más trágico de la saga, pues murió en 2013 en un accidente automovilístico.
Desde entonces, el actor fue el gran ausente de la franquicia y la nostalgia de sus compañeros, lo que obligó a recurrir al CGI (con el apoyo de los hermanos de Walker) para otorgar un final destacado a su personaje.
Así las cosas, el coprotagonista de la primera Fast & Furious formará parte de la lista de estrellas que han sido revividas digitalmente, como por ejemplo Carrie Fisher y Peter Cushing, ambos en entregas de Star Wars.
Tratándose de Walker, muchos se cuestionan si esta decisión de revivirlo para Fast & Furious XI será una muestra de cariño por parte de sus excompañeros, o una ambición más de parte de Hollywood.
